domingo, 10 de mayo de 2020

VIUDA.


La gente te llama viuda,
ya no está tu compañero.
No hay flores en el florero,
de ilusión estas desnuda.
Un ángel me envió en tu ayuda,
vine a mitigar tus cuitas.
El cuarto frío en que habitas,
de nuevo tendrá calor.
¡Reverdecerán de amor
tus azucenas marchitas!*

Estás sola, sin amor,
tu jardín, sin jardinero.
No hay quien te diga te quiero,
ni quien te traiga una flor.
Me hablas de tu dolor,
en confidente amistad.
Yo oculto mi realidad,
de mis labios no has oído,
que también estoy perdido
en un mar de soledad.

Tu causa no está perdida,
desde el cielo te escucharon,
los ángeles me mandaron
a que curara tu herida.
Vengo a darte nueva vida.
¡Sonríe no sientas temor!
Vierte en mi alma tu dolor
verás cómo tu pasado,
terminará sepultado
con toneladas de amor.

Bebe un trago de mi vino,
come un trozo de mi pan,
siéntate, deja el afán,
haz un alto en el camino.
En tus ojos adivino,
la soledad y el hastío.
Si esta noche tienes frío,
sabes que cuentas conmigo,
cobíjate con mi abrigo,
pon tu cuerpo junto al mío.


Autor Alejandrino Calvo Sanguino.















No hay comentarios:

Publicar un comentario